sábado, 2 de agosto de 2008

Extraños.

a mi amigo de largas noches virtuales: Jota.


Sumaste algunas noches.

...................Yo algunos días

-junto con lágrimas atrapadas en la garganta-

Y encontramos el resultado de la resta que siempre callamos.


Tú, con tus intentos desordenados,

yo, con mis muertes de fin de semana,

nos damos cuenta que nos conocemos poco

...................y hablamos mucho.

-largamente, de todo y de nada-


Conversamos del frío de tu casa

y del calor de mi cuarto.


Y terminamos riendo con las heridas abiertas de nuevo.


Créeme, te agradezco todo.

El regaño paterno que te callas

y el piropo que me lanzas a medias y disfrazado.

Yo, por el contrario, te he dado poco.

-y demasiado de mi neurosis-


Lo peor

-o lo mejor, no lo sé-

es no conocerte.

Ni saber tus mañas, ni lo mucho que ocultas.

Es por eso que cuando me llames,

-justo cuando desmaye-

es probable que no sepas como levantarme,

y te inventes una manera nueva que nadie había intentado.


Así que, déjame ofrecerte un día de vino,

para dedicarte letras sin tu nombre,

y así quedarnos con las noches

....................restar los días que no nos sirven

...........................-que no nos quedan-

para complacernos

y dejar de llorarnos los pulmones.

Miércoles 06/02/08
12.39 a
.m

[modificado el miércoles 21.05.08]
10.00 p.m

No hay comentarios.: